Situación que avergüenza

Por Maru Lozano Carbonell

Todavía tenemos muy en pañales la cultura de la salud mental. Siempre reitero que las enfermedades del cuello para arriba nunca deberían dar vergüenza, como el uso de lentes, frenos, aparatos auditivos, tener de repente piojos, ni mucho menos las enfermedades de adentro, como las mentales.

Ahora que fue el concurso de selección para ingresar a la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas, a los aceptados se les hará un examen en conjunto con el Hospital de Salud Mental de Tijuana gracias al convenio que se firmó y que considero excelente. Este examen psicométrico ayudará a detectar cualquier foco rojo en la salud mental de los chicos y si hay alarma, esta institución de salud mental los atenderá. ¡Qué bien!  

No se trata de condicionar el ingreso, pero sí se trata de atender lo que el Dr. Bustamante dijo: “Un 35% de alumnos, tienen un problema relacionado con la psiquiatría”.

Sería buenísimo que todos entendiéramos a los encargados expertos en la rama de esa parte intangible que es tan importante atender.

Tenemos a los psicólogos. Psicología es la ciencia que estudia los procesos mentales afectivos, cognitivos y conductuales. Te pueden observar, hacer pruebas y diagnosticar. Ellos trabajan en campos como la educación, salud, medioambiente, producción, consumo y convivencia.  Ayudan a mejorar cuando una persona tiene algún trastorno que le impide avanzar y realizarse para ser feliz y vivir en sociedad.

Tenemos también a los psicoterapeutas que son los que aplican procedimientos validados científicamente para crear hábitos sanos eficaces. Para resolver problemas, los psicoterapeutas se especializan en varias técnicas y métodos específicos como pueden ser: La humanista, cognitivo-conductual, interpersonal, etc. Si un psicólogo no tiene entrenamiento para dar terapia o no se ha especializado en algún campo específico, el psicoterapeuta es quien después del diagnóstico del psicólogo, te da tratamiento.

¿Qué hace el psiquiatra? Es un médico facultado para diagnosticar, prevenir, tratar y rehabilitar enfermedades de la mente porque se centran en la fisiología y química cerebral.

De inicio un psicólogo te puede canalizar para que recibas tratamiento con un médico psiquiatra y a la par tener tratamiento psicoterapéutico. Estamos hablando de que tenemos que contar con un equipo multidisciplinario. Mira, como cuando se poncha la llanta de un carro, ¡llevas todo el carro! Se enfocan en la llanta, pero eventualmente necesitas integrarla a la unidad.

Estas tres fuerzas de la salud que atienden la mente, es buenísima. El principio de estudios que tienen los psicólogos, psicoterapeutas y psiquiatras los hace diferentes porque cada uno se especializa en su terapia, ya sea mental o farmacológica.

Comprender el comportamiento humano es la base para tratar un conflicto. ¿Qué de malo hay en que nos ayuden a desenredar la madeja? Dejémonos llevar por el psicólogo que nos orientará, por el psicoterapeuta que nos ayudará a mejorar nuestra calidad de vida y en su caso, por el médico psiquiatra que nos dará medicina para mejorar esos síntomas que de pronto nos incapacitan.  

Sí o sí tenemos que estar bien para que podamos vivir en sociedad y, si todas las escuelas hicieran lo que la Preparatoria Federal Lázaro Cárdenas está haciendo, la cultura de salud mental sería parte esencial en nuestro menú diario. 

A veces no se trata de “echarle ganas” sino de atender bien una condición o enfermedad. ¡Confiemos en los que saben de ello!