Por Adriana Zapién y Valente García de Quevedo
“De tener una ciudad totalmente gris y triste obtuvimos una ciudad con color, mucho ambiente y que ahora está de moda”
Micheline Bayor funcionaria de Katowice
En los últimos años la ciudad polaca de Katowice ha tomado relevancia en los temas sustentables poniendo el ejemplo de lo que una ciudad logra si se propone evolucionar.
Desde hace 20 años el municipio tomó la decisión de dejar de ser la ciudad del carbón y acero para convertirse en la ciudad de la cultura y los negocios, convirtiéndose en un imán turístico que desarrolló una industria hotelera y gastronómica de altura para la nueva vocación de la ciudad.
Katowice fue una ciudad desarrollada por sus minas alojadas en las montañas cercanas, pasando de ser un pequeño pueblo del siglo XVIII a una potencia industrial minera de la Alta Silesia en Polonia. Y ahora a pesar del gran reto, intenta dejar la dependencia del carbón y apostarle a las energías renovables descubriendo y encontrando formas de vida y trabajo más limpias. Y por lo tanto más sostenibles.
Tal vez por todo el esfuerzo que representa, pero sobre todo por los resultados obtenidos, en 2018 la ciudad de Katowice fue sede de la edición 24 de Conferencia de las Partes de las Naciones Unidas sobre Cambio Climático (COP24) y este año 2022 será la ciudad anfitriona de la edición número 11 del Foro Urbano Mundial organizado por ONU-Habitat (WUF11) con el tema “Transformar nuestras ciudades para un mejor futuro urbano”.
Una selección bien merecida ya que esta ciudad del sur de Polonia tiene un rumbo trazado para convertirse en una verdadera ciudad sostenible, que no solo tiene que ver con los esfuerzos sobre la transición energética y el diseño de la ciudad, sino que su gobierno está comprometido con fomentar inversiones para el desarrollo económico, vinculadas al desarrollo cultural como palancas para la regeneración y la renovación urbana, bajo la premisa “De la industria pesada a las industrias creativas”.
En la renovación de espacios culturales está como pieza clave el Museo Silesiano, construido en una mina de carbón como símbolo de remodelación urbana.
El sector musical como parte de la conversión a las industrias creativas es clave en Katowice para el gran desarrollo socioeconómico de la ciudad con 27 festivales de música a lo largo del año, tres de ellos con relevancia a nivel mundial, meten a la economía de la ciudad 2.7 millones de euros anualmente.
Katowice es un centro de educación musical integral y en el plan de industrias creativas estuvo el establecimiento del MusicHUB, una especie de incubadora de talentos locales emergentes y emprendedores creativos para fortalecer las oportunidades laborales en la industria de la música, especialmente dirigida a jóvenes, mujeres y grupos desfavorecidos con asociaciones público-privadas. También se apoya la investigación del Centro de Innovación SoudLab para mejorar la calidad de la vida urbana. Acciones que en conjunto llevaron en 2015 a ser nombrada por la UNESCO como la “Ciudad Creativa de la Música”.
La amenaza que significa la guerra de Rusia contra Ucrania implica que tal vez cambie la dinámica del Foro Urbano Mundial planeado del 26 al 30 de junio en Polonia; sobre todo porque Katowice está a 400 kilómetros de la ciudad ucraniana de Leópolis, ubicada a 70 kilómetros de la frontera con Polonia, que ha sido blanco de ataques. Mientras la agenda del Foro no ha cambiado, queda en el aire mi decisión si cancelar los planes de viaje a Katowice o seguir. ¿Ustedes que harían?