En el segundo cajón de la izquierda

Por Ana Celia Pérez Jiménez

Abro los ojos y no todo está en su lugar, y no pasa nada, al menos no dejo que me pase. Es difícil soltar el control de las cosas, soltar eso que no me pertenece, soltar porque sencillamente hace más daño seguir atado, ataduras que yo misma hice y reforcé, eso sí lo advierto y aclaró.

No soy una pera dulce, pero también no me gustaría, tengo mis momentos sobrios, momentos de locura, pero pienso que eso todos y si no es así, espero que en algún momento los tengan.

La gama de colores hace el mundo, la gama de emociones y vivencias hacen rica a la persona, dicen que siempre y cuando uno canalice las cosas, yo no siempre lo hago y de todas formas me siento afortunada de sentir tanto y de qué formas.

Tengo mis tendencias turbias, mis arraigos, apegos, dolores, pensamientos recurrentes que lastiman y yo también lo permito, por cansancio, vicio o costumbre. Hay días claros y sencillos, no porque les falte encanto, pero despierto despejada, también descansada y puedo acomodar cada cosa que se me viene en su cajón respectivo, sin drama, sin preguntas, sin duda y por un día o tal vez horas, me siento precisa, en paz, como una archivista en ritmo.

Siempre pienso mucho, pienso demasiado y no siempre en creativa, hay ratos que en viciada, dando vuelta a las cosas, en una rotonda de tiempo, entre ciclos pasados, entre palabras no dichas, en un hecho no desahogado.

Es curioso que con todo esto no me siento joven, pero tampoco vieja, me siento viviendo, me siento atenta, me siento adentro y también predeciblemente afuera. ¡Qué mujer!, me digo, estoy contenta y orgullosa de mí, con todo esto y con lo que no expreso, con lo que luchó y con lo que dejo ser.

Todos tenemos una trayectoria, todos tenemos un motivo o varios de ser y estar, tal vez propios, tal vez para el mundo, para el otro, pero quiero pensar e ingenuamente creer que existen motivos más grandes que nosotros, cosas que solo los creadores de almas entienden, pero yo no, sólo sé que es y existe, divago e invento.