Por El Recomendador
Los creadores de nuevas series quieren enseñarnos un futuro terrible porque ya no cabemos en el mundo o lo hemos arruinado de tal manera que muchos han de vivir en la miseria mientras que unos cuantos lo tendrán todo en adelantos y oportunidades. En el fondo subsisten algunos ilusos que buscan justicia para todos, pero, los más, lo que quieren es convencernos de que Malthus tenía razón y que lo que tenemos que hacer es suprimir a muchedumbres estorbosas y dejar solamente a quienes caben en ese mundo del futuro descompuesto por los propios hombres.
Dice la propaganda de Netflix que viene produciendo la serie El 3% desde sus inicios: “En un futuro oscuro no muy lejano, los jóvenes acuden a un centro de exámenes para ganarse un lugar en una tierra idílica.”
Claro hay que decir qué esa tierra idílica es para unos cuantos. Pedro Aguilera, el creador de la serie, asegura que solo un tres por ciento deberán vivir como privilegiados y que el resto han de quedarse en un continente lleno de pobreza de hambre, enfermedad y de injusticia.
El tres por ciento seleccionado irá a “Alta Mar” a vivir como sultanes, sólo que tendrán que ser esterilizados: nada de tener hijos. Algunos se van a oponer a esa selección y organizan una causa violenta para suprimir esa selección tan cruel. Otros, quedarán muy conformes y a favor del statu quo y venderán su alma al diablo para poder ser triunfadores en esa selección rigurosísima que dejará fuera a las mayorías. La serie lleva tres temporadas y la tercera, al final anuncia una guerra que vendrá, por supuesto en el negocio de la cuarta temporada de la que no se sabrá si tener o no la esperanza de que el enredo termine, por fin, aunque nadie podrá adivinar si será para bien o para mal de los sufrientes y combatientes de ese mundo ficticio.
Se trata de un futuro distópico, lo que quiere decir que no se vislumbra en el más utopía ni proyecto idealista que el de los personajes rebeldes dispuestos a matar o morir por arribar a una futura justicia que nadie sabe cómo se podría lograr.
Recomendación
Pero hay un tip o recomendación para los muy listos. Este Recomendador ha descubierto una especie de hilo negro. A veces, los que estamos hartos de la televisión basura, plagada de anuncios, estafas e idioteces queremos una veredita alternativa.
Pues bien, si usted cuenta con un Facebook en el que su propio buen gusto haya escogido como favoritas a seguir ciertas páginas sensacionalmente inteligentes que tocan los temas que a usted más le gusta, haga el siguiente experimento: Al lado izquierdo debajo de su nombre hay la opción “watch”, usted la selecciona con el ratón y se pone a ver los mejores videos sobre los temas y la música que le fascinan. ¡Al diablo con las instituciones televisivas y de entretenimiento gobernadas por el imperialismo internacional del dinero!