Por Juan José Alonso Llera
“Mejorar la eficiencia no resolverá el problema de los recursos finitos, un cambio completo es lo que se necesita”
La economía circular (CE, en ingles) es una simple, pero convincente estrategia, que tiene por objetivo reducir tanto la entrada de los materiales y la producción de desechos vírgenes, cerrando los flujos económicos y ecológicos de los recursos.
Los flujos materiales son de dos tipos, nutrientes biológicos, diseñados para reintroducirse en la biosfera, y nutrientes técnicos, los cuales están diseñados para circular con alta calidad en el sistema de producción pero no vuelven a la biosfera.
Mas allá de definiciones, lo que se necesita es una manera de pensar y actuar distinta hacia el desarrollo económico, cambiar de una economía lineal actual y poco consciente (recursos naturales, extracción, producción, consumo y basura) a una circular (reciclar, reparar, reusar, reducir basura, eco concepción, rentar por encima de comprar y simbiosis industrial).
Para entender un poco más este concepto se busca CERO basura, por medio de:
- Innovación en mercados para materiales reciclables.
- Creación de nuevos modelos de negocio, centrados en compartir el uso de los activos.
- Implementar el Eco-diseño en la producción.
- Simbiosis industrial, eco parques. La colaboración creativa entre los generadores y consumidores para que sea redituable.
Por último y no menos importante en este Brief de la CE, hay que modificar nuestra definición de basura de deshecho a recurso, ver a la basura como una oportunidad económica, que requiere un tratamiento en el ciclo mercantil: Reciclaje, proceso biológico, recuperación de energía e incineración.
Hay que reconocer que la basura de alguien es un recurso para otros y que se plantea una jerarquía de la basura que hay que entender y seguir: Reducir, reusar, reciclar, recuperar, verter. Para cerrar la pinza de nuestra CE, requerimos trabajar más en la economía colaborativa, que ya les he hablado ampliamente en artículos pasados (Airbnb, Uber, Josephine, etc.).
Sin duda hoy para mi límite de 500 palabras los he abrumado con un sinfín de ideas y conceptos, que de hecho se resumen en que nos estamos acabando al mundo, porque hemos sido bastante ineficientes en el uso de lo que el planeta nos da, y hemos llegado al punto en que no podemos seguir así, motivo por el cual debemos de evolucionar de una economía lineal y derrochadora a un esquema circular de eficiencia, con una colaboración de todos para generar mejores comunidades para vivir, disminuyendo lo más posible la huella ecológica.
Esto no es una moda, es una realidad y oportunidad de negocio, haciendo simplemente lo correcto.
La regla de las 3R (Reducir, Reutilizar y Reciclar) fue una iniciativa presentada en la cumbre del G8 de 2004 con el objetivo de promover unos hábitos más responsables con el medioambiente. La necesidad de avanzar hacia un modelo productivo más sostenible basado en la economía circular ha hecho que esta regla evolucione a las 7R, que son siete conceptos claves para la economía circular: reflexionar, reducir, rediseñar, reutilizar, reparar, reciclar, recuperar.