Por Adriana Zapién y Valente García de Quevedo
Mis compañeros de viaje saben que pueden dejarme la búsqueda de los hospedajes cuando viajamos, porque es algo que amo hacer. Lo primero que disfruto de la búsqueda, es la primera impresión de las imágenes que me invitan a la lectura de las reseñas de los viajeros, ya que a partir de eso diseño una experiencia; de hecho, no analizo ningún hospedaje que tenga evaluaciones menores a 8.5 puntos de 10, ya que eso es parte de lo que garantiza el éxito.
Hay muchas personas que conozco que tienen en su lista de viajes hacer el Camino a Santiago de Compostela, algunos por el significado religioso, pero la mayoría lo quieren hacer por todo lo que escuchan de las personas que lo han caminado.
Prácticamente es una recomendación boca a boca porque es una experiencia que te deja huella. Así que, al regresar del viaje, más de un amigo que lo tiene en sus próximos planes me ha pedido la lista de hospedajes de cada una de las ocho noches donde descansamos para recargar energías para el tramo del siguiente día.
Cabe aclarar que no tengo ningún interés comercial, solo pretendo compartir lo que nos funcionó, y aquí va la lista:
Día uno, Albergue & Gastrobar Mecadorio ubicado en el corazón de la Ribeira Sacra a 17 km de Sarria que, si bien tiene habitaciones comunes, también cuenta con 2 habitaciones privadas muy acogedoras que fueron las que nosotros disfrutamos con unas vistas espectaculares en medio del campo. Lo maravilloso es que este albergue tiene un restaurante donde comimos, cenamos y desayunamos espectacular.
Día dos, Hotel Ferramenteiro de Portomarín, es un hotel nuevo que tiene una hermosa vista al rio Miño, ubicado a unos pasos del restaurante O Mirador que por cierto de los recomiendo para premiarse con una grandiosa comida y un buen vino de Ribeira Sacra después de la caminata a Portomarín.
Día tres, Hotel As Torres da Hermida, puedo decirles que este fue a mi opinión la mejor de las sorpresas, pues es un hotel boutique dentro de una antigua edificación que se estima tiene más 300 años, emplazada en la Comarca de Ulloa en el corazón de Galicia, pidan las habitaciones de la terraza porque por la noche podrán admirara el cielo estrellado. Les recomendamos dedique tiempo para disfrutar del baño sauna.
Día cuatro, Casa Blanco, es un hospedaje dentro de la categoría turismo rural que está dentro de una típica casa rustica gallega de piedra, construida en 1880 en medio de una llanura en la aldea de Sambreixo en Palais del Rei. Donde la atención de María y Tomas es grandiosa ya que se encargan además de preparar la cena y el desayuno.
Día cinco, Pensión San Antón ubicado en el corazón de Melide que además cuenta con piscina donde puedes relajarte después de la caminata.
Día seis, Viviendas Uso Turístico Arzúa, este más que una habitación era un departamento completo de cuatro habitaciones, lo que nos permitió cocinar por la noche.
Día siete, omitiré el hospedaje en O Pedrouso porque además que no había muchas opciones, pero el hospedaje cumplió con la función de dormir bien antes del último tramo que nos llevaría a Santiago de Compostela.
Día ocho, Hotel & Wellness Vía Aetcal ubicado en el corazón del casco histórico a cinco minutos de la catedral de Santiago de Compostela. En este hotel te puedes dar el premio final en su spa y relajarte de la larga caminata, con un buen masaje, disfrutar de su baño turco y su jacuzzi.