Hace pocos años atrás, Chris Johnson era de los corredores más temidos de la NFL, por lo menos era el más veloz. Después de ser liberado por los Titans tras seis años de servicio, Johnson se encuentra a punto de escoger el destino que posiblemente lo relance, o lo entierre.
En una era donde se le paga más a un pateador elite que a un corredor regular, sigue habiendo una pequeña demanda para corredores como “Chris 2K”. Dudo que vuelva a tener otra temporada de 2,000 yardas, pero sigue siendo la mejor opción en el mercado. Es el único “running back” que actualmente promedia 1,000 yardas o más en cada una de sus seis temporadas.
Entrando a su séptimo año como profesional, “CJ2K” carece de la explosión lateral que solía poseer. Aún promedia cuatro yardas por acarreo, y te puede aguantar el trabajo con al menos 15 o 20 intentos por encuentro, algo que casi no se ve hoy en día. ¿O simplemente la posición se encuentra en peligro de extinción?
Los Titanes no lograron intercambiarlo antes de la fecha límite hace dos semanas. Si la franquicia se hubiera quedado con él, le hubieran tenido que pagar por lo menos 8 millones de dólares por la siguiente campaña. Reportes recientes indicaron que los Jets eran los más cercanos en aterrizarlo, y aún siguen interesados, según lo que pida el ex alumno de la universidad de East Carolina. Debido al valor de la posición, se escucha que el tres veces todo estrella recibiría la mitad de su salario previo y por menos tiempo, quizá por no más de dos años. Sin duda no son buenos años para ser velocista en la NFL. También hay rumores donde señalan que Johnson no solamente fue otra víctima de espacio salarial en una nómina atascada, sino también fue despedido por su mala actitud y falta de disciplina. Su ética de trabajo ya no era la misma según gente cercana a la organización. No hay que echarle toda la culpa a “CJ2K”, la línea ofensiva ya no le abría los huecos como lo solían hacer a principio de su carrera.
Es muy probable que Johnson empaqué sus maletas al final de la semana.
Atlanta, Búfalo, y Miami son otros posibles destinos, pero el que más hace sentido es Nueva York. Un mariscal móvil es justamente lo que necesita a su lado, además los Jets siguen siendo de los pocos que le dan importancia a la corrida.