Por Maru Lozano Carbonell
Walter Riso, nacido en Nápoles, Italia es doctor en psicología y autor de libros espléndidos que nos ayudan perfectamente a centrarnos en nosotros mismos y de ahí partir.
Walter dice que nos han educado bajo la idea de que si amas, su inercia ayudará en todo. No es así porque el amor es una “construcción personal y social”, la explosión de cosas lindas no viene de fábrica, definitivamente nos convertimos en guerreros afectivos todo el tiempo.
Solemos creer que al enamorarnos, comenzar un nuevo trabajo, etc., ya la felicidad absoluta perdurará. ¿Ya te sonó imposible? Ojalá con el “amor” todo bastara porque en realidad el amor es visto como algo que está como nube flotando y cubriendo nuestro cielo, cuando podríamos tener una visión más realista desde el punto generador que somos nosotros mismos.
Es que sufrimos de crisis existenciales cuando ponemos todo desde fuera como eso de que el amor todo lo puede cuando la verdad es que ¡todo lo puedes tú! Implica hacer muchas cosas, implica aceptar otras, ceder, comunicarse, respetar… Hay varias ideas que sí tienen que ser como las tuyas, por ejemplo, quizá no te involucrarías en un trabajo donde la creencia religiosa es primordial y aparte, diferente a la tuya. Lo mismo pasa con amistades y pareja, hay que partir de una base común, de valores que se pueden compartir para de ahí seguir juntos.
Es coincidir en lo fundamental, sentir afect0o y sobre todo cuidarte tú para saber cuidar al otro pero no esperes lo mismo que das. Efectivamente lo que uno genera se regresa como bumerán, sin embargo, si tú eres fiel no esperes fidelidad, si tú eres honesto, no esperes honestidad porque sencillamente estamos hablando ya de otras personas, que tienen su propio centro operativo, sus propias necesidades y gustos, sus propios criterios, su propio ritmo y madurez.
Este inicio de año es bueno vivir con el propósito que quieras, pero que sea realista y dividir un tanto en lo que te darás a ti para el propio bienestar físico, espiritual y mental, ¿cómo vas a nutrirte en ese sentido? ¿Qué vas a leer y aprender cada día?
Y otro es el propósito de tu construcción en sociedad, ¿cómo te vas a conducir hacia los demás en todos tus entornos? ¿Te tienen que empujar o te tienen que frenar? Y lo mismo aplica para tus expectativas de lo que sientes merecer, es decir, a la gente que tiene interés en ti no hay que empujarla, ¡hay que frenarla! Y si tienes que forzar la máquina, lo que sucede es que tienes que trabajar en tus expectativas, aterrizarlas y modificarlas. Si alguien duda de estar contigo, de trabajar contigo, etc. retirarse es lo mejor porque, no desean hacerte daño, simplemente son diferentes metas de esa “otra” persona. Tu valor está intacto.
Se puede construir una relación, la que sea, de varias maneras, sólo habría que revisar qué se puede dar con equis persona, en equis lugar, en equis espacio e ir juntando tus necesidades e ir buscando cómo satisfacerlas sin la terquedad de que todo salga de una misma fuente. Y por favor, si te sientes humillado o incómodo en el constructo de tus relaciones interpersonales, haz una pausa, escribe ventajas y desventajas y replantea la compañía y tu sendero.