Por Guadalupe Rivemar
Tijuana es una ciudad mítica. Con su pasado de leyenda negra y su presente de leyenda roja la ciudad se vive de manera intensa; su historia de escribe a diario en la prensa local donde usualmente la nota policiaca salta de una sección antes reservada para morbosos y afectados, a las primeras planas. Pero hace falta que a nuestra ciudad se le escriba desde otras perspectivas, con una escritura que nos devuelva la imagen de este escenario cotidiano que se antoja digno ficción, y nos permita vernos y reinventarnos en el espejo de lo literario.
Manual de sobrevivencia en la ciudad T es un libro escrito por Leobardo Sarabia que cumple con esta expectativa. Esta obra nos presenta una serie de textos breves a manera de postales donde la ciudad de Tijuana se presenta ante la mirada del lector como una experiencia a la que hay que enfrentar con un manual que nos permita salir ilesos de ella.
Los textos que comprenden el libro saltan en tiempo y en espacio sin orden específico con descripciones donde los detalles se nos presentan a través de una prosa pulcra y elaborada, característica del autor para quien la ciudad se ha convertido en el pretexto para su escritura. Las crónicas de esta obra en particular nos dan instrucciones convenientes para pasar desapercibidos y no llamar la atención: “Elija el toque impersonal, el ascendiente neutro de los grises, los pantalones rectos, la mesura y la voz en sordina. Vaya a los cafés, deténgase ante los afiches de turismo y tome asiento de espalas a la pared”.
En ocasiones el mismo título del texto, nos indica en tono imperativo, directo y sin contemplaciones, lo que hay que hacer: Aléjese de la narcofiesta, Enamórese, Apártese del falso México, o Acuda a las tiendas de segunda. Cada texto es como una puerta entreabierta que vamos encontrando a lo largo de un pasillo y nos invita a asomarnos a su interior, cuando echamos un vistazo a la escena, nos transportamos a la Avenida Revolución, al Pueblito de La Mesa, la Casa del Migrante, a una colonia de la periferia, o el centro de una ciudad. Por doquier se respira una atmosfera de tensión; en cualquier espacio de la ciudad T hay que estar alertas a una mirada furtiva o una bala perdida.
Sarabia quien fuera director fundador del IMAC y director de las revistas culturales Esquina baja y Escenarios, autor de otros libros de crónica urbana como En la línea de fuego. Relatos policiacos de frontera y Zona de Turbulencia es un observador minucioso e implacable, no se anda con medias tintas y encuentra la palabra precisa para nombrar lo que ve.
La pregunta de siempre: ¿crónica de ficción? Si lo que leemos es una verdad o estas escenas son salidas de la imaginación del autor, no debería interesarnos tanto como el que en el Manual de sobrevivencia en la ciudad T se vislumbra a nuestra ciudad desde una perspectiva noblemente enriquecida por la literatura.